Cansados de la típica fotografía de enamorados donde la pose no puede ser más artificial, la mayoría de parejas buscan la originalidad y la creatividad en sus reportajes de boda. Ahora lo que se pide es que las imágenes tengan personalidad y por eso se toman planos cortos y encuadres en los que la pareja, o un miembro de la misma, realiza alguna actividad de la que es aficionado. Alguien que sabe mucho de esto es
Luís Oliva, un fotógrafo alicantino famoso en toda la Comunidad Valenciana por sus reportajes de boda. En ellos lo que prima es la atención al detalle y por eso no vemos los típicos posados forzados, sino que podemos ver imágenes con paisajes infinitos, detalles del vestido de la novia e incluso imágenes tomadas bajo el agua.