Si la salud es lo primero, debemos poner todos los medios que se encuentren a nuestro alcance para intentar que no haya nada que nos pueda ocasionar un severo perjuicio. No es fácil conseguirlo, está claro, pero hay que procurar permanecer pendiente de todo lo que tenga que ver con nuestro estado de salud. Ni que decir tiene que es una labor complicada muchas veces por el hecho de que la salud depende de una buena cantidad de cosas, pero merece la pena que intentemos apostar por ello. Nuestro cuerpo nos lo va a agradecer de una manera realmente importante.
Una de las cuestiones con las que hay que tener especial cuidado es con el simple paso del tiempo, que afecta en una medida mayor a nuestro cuerpo de lo que solemos pensar. Son muchas las personas que sufren estrés oxidativo en España y no cabe la menor duda de que ese es uno de los problemas que más puede marcar la calidad de vida de las personas conforme avanzan los años. Ni que decir tiene que debemos procurar, en la medida de lo posible, limitar los efectos de un problema como este, que afecta directamente al modo en el que nuestro cuerpo envejece.
Según una página web que fue publicada en la página web del diario El Español, el estrés oxidativo es uno de los enemigos silenciosos de nuestro organismo, y es ese tipo de problemas los que más desventajas suelen provocar. El motivo es simple. Al ser silencioso e ir metiendo sus consecuencias progresivamente y sin que nos demos cuenta, no ponemos todos los medios en la mayoría de los casos para evitarlo. Y está claro que eso es lo que conlleva que tengamos una cantidad más grande de peligros a los que hacer frente.
Son muchas las cuestiones que pueden afectar de una manera importante a todo lo que tiene que ver con el estrés oxidativo. Una de ellas, aunque parezca incluso imposible, es la depresión. El descubrimiento de que la depresión causa estrés oxidativo es fruto de científicos españoles según indica una de las noticias que vio la luz en la página web oficial de RTVE. No cabe duda de que, siendo eso así, hay muchas opciones de que en algún momento empecemos a padecer los efectos de un estrés oxidativo que, de verdad, hacednos caso, causa estragos a la larga.
El estrés oxidativo ya es uno de los principales causantes de los problemas que nos afectan a medida que vamos cumpliendo años. Así nos lo han indicado los profesionales de Tetrasod, que nos han indicado que cada año crece la cantidad de personas que sufren alguna patología ligada de alguna manera a ese estrés oxidativo. Ni que decir tiene que el desgaste físico que va obteniendo el cuerpo con el paso de los años y el desgaste mental que también se va acumulando suponen una desventaja que hace crecer este tipo de estrés y que sigue generando un montón de dificultades para hacer vida normal a muchas personas.
No es un problema exclusivo de ancianos
Debemos hacer incidencia en una cuestión que no todo el mundo tiene clara: el estrés oxidativo puede afectar a todo el mundo, no es algo que solo se vaya a ver reflejado en las personas mayores. Los ancianos y ancianas es cierto que tienen una cantidad mayor de opciones de sufrirlo porque su cuerpo tiene un mayor desgaste acumulado que el de una persona joven, pero huelga decir que los jóvenes también podemos sufrir esos episodios de estrés oxidativo por muchas razones. Es mejor que, para detectar cualquier problema, estemos atentos a los mensajes que nos manda nuestro propio cuerpo.
Especial incidencia queremos hacer en lo que ya hemos comentado más arriba: y es que no todos los problemas que están ligados de alguna manera al estrés oxidativo no tienen por qué ser de índole física. También puede haber algunos de índole mental, como la depresión, que tristemente se ha convertido en algo bastante habitual entre la población española y que va a seguir formando parte de la sociedad de este país y de la de otros países durante bastantes años más.
Estamos hablando de un asunto serio y que requiere de la máxima atención por parte de las personas que lo sufren. El estrés oxidativo afecta de una manera bastante importante a nuestra calidad de vida y debemos hacer todo cuanto esté en nuestra mano para evitarlo. Muchas veces no es fácil, eso está claro, pero hay remedios para retrasar su aparición y para que sus efectos no sean tan peligrosos para nuestro día a día. Ojalá que, pronto, haya menos personas que sufran esos efectos. Será el mejor indicador para demostrar que se están haciendo las cosas bien.