La educación siempre debe ser un pilar fundamental en el crecimiento de un país. Hay ejemplos más que de sobra para demostrar la importancia que tiene en una nación la educación de sus generaciones venideras y grandes ejemplos que demuestran la existencia de Estados fallidos que han fracasado a causa de la inexistencia en sus colegios de una educación de calidad, que normalmente termina llegando cuando se forman mejores profesores y se invierte en infraestructura. Es evidente que, luchando por esto, conseguiremos avances más que significativos en la materia.
La educación también va evolucionando a medidas que vamos incorporando materias en ella, materias que son de uso recomendable para todas aquellas personas que, en el futuro, serán independientes. Una materia de la que os vamos a hablar, que no es otra que la educación física, tiene una importancia tremenda, mucho más grande de la que todos podemos llegar a pensar. Normalmente es concebida como la más alegre para la mayoría de los niños y niñas que están en el colegio o el instituto, pero es capital en lo que a su formación se refiere.
Se trata de una ciencia a través de la cual tenemos la posibilidad de conocer nuestro cuerpo de una manera mucho más profunda. Es la que más puede poner a prueba nuestros límites. Y, por ende, es una forma de que exploremos quiénes somos y a qué podemos aspirar. Se trata, por otro lado, de una asignatura que cultiva mucho la salud mental. Y es que todo lo que tenga que ver con deporte podría ser concebido como un alivio para nuestro cerebro, ya no solo porque es una actividad diferente al resto, sino porque nos permite, al mismo tiempo, cultivar nuestras relaciones sociales.
Una noticia que fue publicada en el portal web de EF Deportes indicaba cómo ha sido la evolución de la educación física en un sistema educativo como lo es el español. En él, se indica que esta asignatura no formó parte del sistema educativo español hasta mediados del siglo XIX, algo que pone de manifiesto hasta dónde llegaba la ineficiencia del sistema educativo en nuestro país durante dicha época y que provocaba que fueran tantas y tantas personas las que vivían en el analfabetismo más absoluto sin que nadie pudiera evitarlo.
Otra noticia, en este caso propiedad de la revista Ventana Abierta, hablaba también de esa evolución histórica haciendo hincapié en que el auge de esta disciplina comenzó a producirse con la entrada del siglo XX, un momento en el que un deporte como el fútbol, por cierto, empezaba a ser habitual en el interior de nuestras fronteras (por poner un ejemplo, la Copa de Coronación de Alfonso XII, la antesala de la conocida actualmente como Copa del Rey, se celebró por primera vez en el año 1902). Esos años tuvieron una importancia considerada realmente importante por los expertos para que la educación física comenzara a desarrollarse en las aulas de nuestro país.
Por suerte, en la actualidad una disciplina como la Educación Física es obligatoria durante toda la educación primaria y la secundaria. El argumento que se ha ido manteniendo para defenderla en la primera línea del sistema educativo es que es idónea para cultivar la salud y los hábitos físicos en los menores, previniendo males como el sedentarismo y la obesidad. Además, no son pocos los que defienden su valor para la mente humana y para el desarrollo de habilidades sociales, como os hemos comentado en otra ocasión. Esto es lo que hace que, en los momentos en los que nos encontramos, la Educación Física esté viviendo su Edad de Oro en España y que cada vez, además, haya más personas interesadas en impartirla. Es lo que nos comentan desde Oposición Educación Física.
La asignatura preferida de los adolescentes
Si hiciéramos alguna encuesta entre los adolescentes que persiguiera el objetivo de conocer cuál es su asignatura preferida, probablemente nos encontraríamos con el resultado de que la Educación Física es la reina del colegio o del instituto. Es algo que nos parece muy evidente y para cuya comprobación solo hay que mirar las caras de los alumnos. Que esto sea así es muy importante, porque de ello se desprende que la asignatura motiva y, de la mano de un buen profesor, puede contribuir de una manera notable a que el alumno sienta verdadera pasión por los deportes y, en definitiva, elimine malos hábitos como el sedentarismo de su rutina diaria.
Mover el esqueleto, a fin de cuentas, siempre será una de las necesidades más grandes para garantizar la salud de las personas. Y para ello, es necesaria una asignatura como Educación Física en los colegios y los institutos. Impartida por profesores que realmente amen lo que hacen y que conozcan la manera de conectar con los jóvenes puede ser vital para que cada cual disfrute del deporte y que encuentre una manera sana de emplear su tiempo libre.
